En su momento nos gustó la visita a Pau, por lo que estas Navidades, en vez de ir a Burdeos, que al ser tan grande había mucho ruido con los chalecos amarillos, optamos por ver a Papá Noel en Pau.
Y luego aprovechar la visita para hacer un pequeño recorrido de vuelta por Iparralde, aprovechando este buen tiempo tan poco navideño, pero tan agradable.
Y ha merecido la pena. A escala pequeña, comparada con los grandes clásicos de los mercados de Noel, tanto en Pau como en Bayona, habían conseguido un buen ambiente navideño.
