una zona no masificada que contrasta con el OTRO algarve.
Escribir estos apuntes sobre playas de surf, sol, arena y pescado, sentado en el escritorio, bajo una manta y con la calefacción puesta, se hace muy cuesta arriba.
Pero hemos tenido un verano y un inicio del otoño un poco movido de viajes y justo, justo, consigo viajar y hacer apuntes, pero pasarlo a limpio y recrearlo de nuevo, solo cuando hay unas semanas de tranquilidad hogareña.
Además del Parque, hemos hecho Pirineos por la parte de Canfranc, Costa Brava y Selva, el Camino de San Salvador y Camino Primitivo, Algarve en otoño y con poca gente y finalmente, una preciosa ruta también por Portugal: La EN 2, que comentaré en otra entrada.
Así que fuera mantas y calefacción, pongámonos el bañador (y el neopreno) y vamos a intentar que disfrutéis con nuestro viaje de mirones all mundo del surf.
EL PARQUE del sudoeste alentejano y costa vicentina
En vez de haberlo bautizado con algún nombre ingenioso, han hecho la descripción geográfica del Parque, que está considerado uno de los parques litorales mejor conservados.
La razón de que podamos disfrutarlo aún, ha sido una política muy efectiva de protección y previamente una pobreza calamitosa de toda la zona, sin industrias y con el mísero aporte de la pesca de subsistencia. Ayuda a conservar mucho del pasado y, si las políticos consiguen aguantar las presiones, podremos seguir viendo el ambiente del turismo cool, surfero y furgonetero, y otros pájaros de toda índole que descansan en sus migraciones.
Que diferencia a pocos kilómetros en el Algarve del sur donde vemos lo que es el aprovechamiento de la costa masificada por el turismo.
Al ser un litoral pobre, las pocas poblaciones importante se colocaron al cobijo del interior o de los diferentes ríos ( que de paso crean una playas fluviales donde es posible bañarse y no morir en el intento) y no son demasiado interesantes.
Para ubicar al Parque podemos tomar desde la playa de Sao Torpe en Sines hasta playa Burgao en Vila do Bispo y como poblaciones tenemos Sines y Odemira en el Alentejo, Aljezur y Vila do Bispo en el Algarve. Pero luego tienes aldeas reconvertidas, como Porto Covo, Vila Nova de Milfontes, Zambujeira do Mar, Azenha do mar, Carrapateira, Odeceixe, Sagres…donde disfrutas de la agradable vida relajada del verano.
como llegar
setubal
Teníamos la duda, si empezar en Setubal y bajar, para luego continuar por Algarve o al revés. Pudo empezar por lo desconocido, así que nos dirigimos a Setubal. Conociéndome, Ana puso alguna que otra condición: no toca Lisboa ni Evora y estás de régimen, así que tampoco toca «parar» en las zonas de DOC del Alentejo.
Eso ayudó a hacer un viaje sobrio y rápido: parada en Badajoz, que a pesar del calor, nos gustó y que nos prometimos volver, para ver la alcazaba y dedicar más tiempo a pastar a la fresca en las abundantes terrazas. Continuar como una exhalación para llegar a comer a Setubal y ahí, empezar en serio, nuestro recorrido portugués en el preludio al Parque.
Hay poblaciones a las que sin saber porqué, las malpasamos y nos consolamos diciendo que la siguiente será mejor. Llegamos más tarde de lo previsto por el tute de viaje y algo tarde para los husos portugueses de comida, hacía calor, la entrada no anima mucho, vamos, fea. Aparcamos de mala manera, en un sitio que quedaba descartado para pasar la noche, el frente marino no supimos encontrarlo, pero al menos en una típica Casa de Pasto ( restaurantes de baja categoría, muy de menú del día y donde se puede comer, como señores, cocina tradicional y mucha brasa) ahogamos penas. Hicimos un recorrido superficial por la zona comercial ( la enclavada entre la Avda. 22 de Diciembre, Avda. Luisa Todi, Avda 5 de octubre y R. Santa María).

Hay una brillante campaña de ¡Arrábida sin coches!, donde un buen ayuntamiento hace una fuerte apuesta por el transporte público y reducen o eliminan el tráfico en determinadas fechas/recorridos.
Y el motivo es lógico. La Arrabida es una zona preciosa y un poco complicada si vamos todos como hormigas. Dimos una vuelta con Kapu (nuestra AC) por el Parque y aún cuando no pudimos ver mucho, lo que vimos nos enamoró.
Volveremos a venir a esta zona cuando tengamos como objetivo ir a Lisboa.
Y como tocaba costa del Parque, enfilamos a una población más pequeña, más accesible, más cerca…
alcácer do sal
Habían ocupado la zona de ACs con carpas pero no nos importó. ¡Eran fiestas y se olía ya a las bifanas! Ya nos sentíamos a gusto. Es una población con unas vistas espectaculares en un meandro del río, entre prados de arroz. Aparcamos razonablemente en medio de una calle y ya sabíamos antes de patearlo que nos iba a gustar. Y disfrutamos.

Orgullosos de su pueblo, han promocionado cinco rutas para destacar blasones, azulejos, uso del agua, pasado Alfonsino y Castillo. Si las sigues, igual tienes la sensación de pasar cinco veces por el mismo sitio, pero queda elegante.
Y cuando salimos de aquí, dejamos el interior y durante un mes no deje de oir la mar mañana y tarde.
Un mes de sufridas y arenosas playas.
COMPORTA
De camino a la costa, vimos una parte de la reserva Natural del estuario de Sado. La visita a los palafitos de Carrasqueira nos permitió ver que estaban recuperándolos y se notaba la diferencia de las maderas. Han estado a punto de que desaparezca por derrumbe… Un grupo de jinetes y camionetas, estaban de romeria y picnic desde Comporta. Hicimos u recorido rápido por la península de Troia, pero la parte edificada no nos gustó, y la parte de playa con el txirimiri no resultaba muy atractiva.

Comporta también estaba de fiestas y el área de AC ocupado. Una población con poco centro y todo desperdigado. Unos bares agrupados donde almorzamos y la sorpresa de ver gente muy chic. Como hippilandia en cool. Y uniformados con vestidos túnicas. De camino a la AC para irnos a la playa nos encontramos con un mercado pijo hippy origen de los uniformes de las chicas que habíamos visto antes. Tarde pero ya nos enteramos que Comporta y su mercado chic forma parte de la modernidad del entorno. Y que te hacia entender el tipo de ambiente y el tipo de bares y restaurantes.
Nos fuimos con la txapela a otra parte.
La playa es espectacular, pero tienes que ir con coche.
SANTIAGO DO CACEM
La historia lo pone como uno de los grandes centros medivales y se nota en la parte alta del pueblo. Precioso.
Pero a pesar de haber estado en dos ocasiones diferentes no somos capaces de encontrar ambiente, bares, restaurantes, gente…. Seguro que las hay, pero para nosotros fue lo más parecido a un páramo.
Era parada obligatoria para la visita que hicimos a las ruinas romanas de Miróbriga.

el parque
Aún cuando fuimos en Autocaravana, nos cruzamos con muchos caminantes.
Desde hace mucho tiempo se han dedicado a promocionar la llamada Ruta Vicentina que a su vez está formada por el Caminho Histórico, recorrido más rural e histórico y el Trilho dos Pescadores , que siendo todo costa une Porto Covo con San Vicente.
Muy tentador para hacerlo y además como no podía ser de otra forma, se enlaza con el Camino Central a Santiago en Santiago do Cacem.
Así que además de las señales de la Ruta Vicentina pudimos seguir las flechas amarillas.
sines
Formado por Sines y Porto Covo. Un inicio espectacular.
Sines tiene un frente marino precioso y un casco viejo medieval de pocas calles donde disfrutas. La parte nueva no hace falta mirarla demasiado. El blanco, que se repetirá en toda la costa, reluce. La playa y la costa está ahí abajo y la población allí arriba. Tuvimos la suerte de ver los coletazos del Festival Músicas do Mundo. Se ve rápido la diferencia de los que hacemos de la AC nuestra diversión a los que utilizan los vehículos como forma de vida para poder ser músicos itinerantes.

Sines además es cuna de Vasco de Gama, que sigue siendo uno de los grandes héroes portugueses.
Comimos como muchos guiris en la Adega de Sines, que sigue conservando tipismo y mugre a partes iguales. Brasa y pescado. Eso y cataplanas de pescado o marisco van a ser los platos habituales en este viaje. El bacalao existe pero no está muy representado.
De camino a Porto Covo tienes que pasar con los ojos cerrados para no ver los complejos petroquímicos.
Son una sucesión de playas, en las que se pueden ver las AC en las cercanías de las playas sin demasiados problemas aún.
Dormimos en la playa de Samouquira con el atardecer, ruido de las olas sin estar demasiado apretujados a otras AC. Otra cosa que hemos podido hacer bastantes veces en éste viaje. Dada la afluencia que ya hemos empezado a ver y que, ya no solo son los furgoneteros cool surferos, sino muchos como nosotros en AC, veremos cuanto dura.

Porto Covo es una especie de plaza grande y tres calles donde se respira el relajo veraniego en las terrazas y restaurantes. Luminoso, con su puertito, con su mercado en miniatura, la panaderia central con pastas recias de pueblo y un par de pequeñas tiendas de aprovisionamiento. Con la suficiente gente para sentirte a gusto, pero sin demasiados agobios. Marques, en su vertiente cafetería y marisquería es una institución. Cenamos en O’Pescador, pero hay mucho para elegir.
Nos encantó la playa de Ilha do Pessegeuiro, antigua zona de abrigo de cartagineses y romanos, con restos de fabricas de garum, que dicen están en la propia isla.
Tras los primeros días en la playa nos dimos cuenta de su manual de uso:
- El agua está fría de narices
- Incluso en el día más soleado hará viento
- Pretender tumbarte a tomar el sol es comer arena.
Entendimos para que eran unos palos unidos por telas o por qué todas las sombrillas venían con faldones o por qué las familias parecían una caravana de vaqueros puesta en círculo.
Optamos por los palos con telas y las hemos incorporado al ajuar habitual al bajar a la playa.

odemira
No llegamos a ver la población de Odemira. Es la ciudad más grande de Portugal en superficie, es la zona donde mayor ha sido la presión del turismo en las cercanías de Vila Nova de Mil Fontes y Zambujeira do Mar. La primera más interesante para patearla.
El motivo es que por como y donde están las playas, son más familiares, algunas son fluviales en las que se puede bañar tranquilamente y están algo más protegidas.
En estas poblaciones hemos tenido mas dificultades de aparcamiento cerca de las playas. Ninguna en los propios pueblos con abundantes parkings grandes.
Las playas que más nos gustaron de estas poblaciones fueron : Furras (mar) y Carvahal.
Entre medio de esas poblaciones , está la zona de Almograve que nos gustó más. En la playa de Almograve hasta nos bañamos. Y el paseo hasta el puerto de lapas tiene unas vistas espectaculares. Y en la zona del cabo sorprende ver agricultura intensiva sobre arena. Tuvo su Prestige y es parecida a nuestra Muxia en cuanto a su recuperación.
De camino a Zambujeira, está el Porto das Barcas. Dos restaurantes y unas casetas. Paraiso del pescado. El de arriba muy fisno, y el de abajo de batalla pero comimos excepcionalmente. Arriesgaros con las feijoadas de buzios(caracolas de mar, de esas de poner el oido).
ALJEZUR
El paraíso de los surferos. Para ellos hablar de Amoreira, Monte Clérigo, Amado, Cordoama, Castelejo, Bordeira Arrifana……es suficiente para salir escopeteados hacia aquí.
Con un poco de masoquismo hemos estado en casi todas las playas y varias tienen unos accesos cuando menos difícil para ir en coche y complicadas para ir en AC.
En general todas ellas son preciosas para pasearlas.
Aljezur tiene personalidad y es bonito. Es un cruce de caminos, río, pendientes, castillo, museos, casas cuidadas en zonas desastradas, tiendas cool y/o alternativas junto a tiendas tradicionales en derribo y oliendo a moho. Mercado mínimo. Aquí degusté Medroño que es el orujo por excelencia de la zona sur. Destilado de Madroño. La playa de Aljezur merece la pena verla desde la playa del río, y andando pasearla hasta la playa de mar. Espectacular. Y la de Arrifana no es para menos.
Azenhas do Mar. El sitio nos permite ver lo que eran los pueblos de pescadores del pasado, pero de los de verdad, de los de vida pobre, pequeño huerto, nasas y redes en rededor, basuras, gatos, puerto mínimo entre rocas, playa de piedras allí abajo. Pero, afortunados de nosotros, tiene un bar restaurante en el que no se reserva, la cocina es continua y se hace cola. A las 12 nos dieron para las 17, así que hicimos merienda cena. Pescado y marisco. Y luego seguían dando comida. No nos quedamos a cenar.


Odeceixe. La playa de Odeceixe es otra de esas playas y río con vistas espectaculares.
Carrapateira. El pueblo en sí no merece la pena. Pero tiene cerca las playas de Bordeira y Amado que junto a los acantilados son espectaculares.

vila do bispo
Vista desde lejos en la colina, el molino, la iglesia la sensación es muy buena, pero es bastante anodina cuando la paseas. Eso si, tiene buenos restaurantes. Optamos por otra cataplana en el O’Mexilhao.

Pero al lado están las playas de Cordoama y Castelejo. Y ya solo por eso merece la pena.
Como todos los puntos geográficos que son los mas….. Sagres es muy visitado. El fuerte y las playas merecen algo la pena, pero es poco agradecida. Cenamos muy bien una cataplana de Bacalao en el Estrella do Mar 2. Suficiente.
Ya de camino hacia Lagos el final del Parque es Burgau. No merece la pena aun cuando lo digan las guias. Pero justo lo contrario la pequeña playa y pueblo de Salema. Disfrutamos mucho del relajo y de la playa y de los baños. El cabo de Sagres marca una diferencia de grados que explica por qué en el Algarve del sur sobra gente.




y se acabó el parque y llego el hormiguero
Teníamos ganas de playa, ya que por muchas en las que habíamos estado los baños eran justo los necesarios para no tener que ir al water. En Salema nos animamos a seguir con el plan previsto y llegamos a Lagos y nos dimos cuenta que no tocaba. Nos habíamos acostumbrado a aparcar, bajar a la playa, ir a otra, comer en sitios con gente pero sin demasiadas colas….y Lagos nos avisó que tocaba multitud de gente, aparcamientos no permitidos a AC.
Antes de tirar la toalla, volvimos a Silves para disfrutar de un gigantesco Festival Medieval y cuando nos fuimos volvimos a recorrer la zona de Aljezur y Odemira.




Está claro que volveremos en breve en pleno verano.
Habíamos descartado el mes de Agosto para viajes, pero sitios como este Parque donde el invierno tiene que ser espectacular pero imposible, la canícula estival se soporta sin ningún problema